Consumidores 2.0

Estamos realizando un análisis con nuestros clientes y abrimos el debate sobre "la muerte del dinero en efectivo", a través de un enfoque holístico (integral) sobre la ausencia de dinero físico y su efecto en la vida diaria.
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Consumidores 2.0
Estamos realizando un análisis con nuestros clientes y abrimos el debate sobre “la muerte del dinero en efectivo”, a través de un enfoque holístico (integral) sobre la ausencia de dinero físico y su efecto en la vida diaria. Estamos hablando desde los clientes millennials, pasando por comerciantes hasta llegar a usuarios de la tercera edad. Al focalizarse en las compras de conveniencia, fundamentalmente en las nuevas generaciones, vemos que la ausencia de dinero cash, va de la mano de la reducción de la espera. “Los millennials, están acostumbrados a lo instantáneo, no son como nosotros que empezamos con los modems dial up. Ellos se mueven en velocidad, quieren pasar a lo siguiente en sus vidas, no perder tiempo realizando el trámite de abonar”. La experiencia de los clientes evoluciona de forma continua, tienen avidez de una vida impulsada por la tecnología. No pueden creer que haya gente que vaya a un kiosco de revistas, a comprar un diario en papel para leer una noticia que tiene 15 hs de antigüedad, que además van a tirar mañana a la basura. Ellos quieren abrir su App de Clarín o Página12 y tener de forma instantánea las noticias actualizadas en tiempo real. Quieren ver algo que les gusta en una tienda online o en Mercado libre y que mañana les llegue a su casa, para poder usarlo en la salida con amigos del sábado. Vemos que lo mínimo que puede hacer un comercio minorista es tener cajas virtuales, sin tener que pagarle a un cajero, ni que sacar número cortando un papel como se hacía hace 100 años. Analizamos que este cambio tecnológico impactará en la rentabilidad, dado que si el local no maneja efectivo, se puede bajar el gasto que implica la seguridad al no haber dinero físico en el comercio; por otro lado las colas se reducen mucho, por lo tanto los tiempos de espera; lo cual ayuda a que los empleados queden libres para ayudar a los clientes a ampliar el rango de las compras tanto las de impulso como las programadas. Es importante destacar que lo que se gasta en tecnología en realidad es una inversión con una recuperacion muy rapida y efectiva, y que se compensa con lo que se ahorra en seguridad lo que sí era un gasto real, un drenaje de dinero continuo y eterno. Una vez que se amortizó la inversión en tecnología, todo el resto es ganancia.

Asesoramos a nuestros clientes minoristas a invertir en tecnología, ya que les permitirá dedicar su tiempo y energía en enfocarse en más en su negocio y sus productos, atendiendo mejor a sus clientes.

Con relación a los datos que los clientes deben brindar, ellos lo hacen de muy buena gana, cuando se los compensa con una experiencia más tecnológica, veloz y personalizada. Un estudio realizado en EEUU, el 60% de las personas no tienen problema en brindar información, si las Empresas lo utilizan de forma seria y no para llenarlos de spam.

Si bien se considera que la onda “sin efectivo” ya es imparable, hasta en las terminales de autoservicio de los cines por otro lado, la preocupación de no excluir a puntuales ramas de clientes como lo pueden ser los ancianos, los cuales pueden ser ayudados por el personal desafectado de la caja. Muchos pronostican un mundo sin efectivo entre los próximos 5 y 10 años.

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